
Foto: Felipe PoGa
La doctora en Ciencias, Doris Sáez Hueichapán, potenció la generación de energía renovable en La Araucanía, a través de micro-redes y asegura que iniciativa participativa es exportable a América Latina para fomentar la integración de otras etnias.
La académica del Departamento de Ingeniería Eléctrica e investigadora del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería, Doris Sáez Hueichapan, junto a su grupo de investigadores de la Universidad de Chile y la Universidad de La Frontera, se han concentrado en la realización de proyectos para mejorar la calidad de vida e integración de las comunidades mapuches.
Los resultados obtenidos y la participación de los beneficiarios, les ha permitido sacar del aislamiento a más de 120 familias de la Región de La Araucanía, gracias a la generación de energía a través de micro-redes.
“Los paneles solares serán una ayuda más para la comunidad. Respetan nuestra cultura y no pasan por encima de nosotros”, dijo Sergio Calluqueo, presidente del Comité de Fierro.
Lo mismo comparte Miriam Nancy, miembro del Comité y profesora de Mapudungun, quien destaca que “es un proyecto positivo, porque primero, se hace un estudio considerando la opinión de la población, sin generar división”. (Ver caso chileno: https://goo.gl/7uC2fo).
Estas experiencias y vivencias son las que le permiten afirmar a los expertos que este modelo podría replicarse en otros países de nuestra región, para fomentar la integración de sus etnias respectivas.
De hecho, la iniciativa ha generado tal interés que en noviembre de 2015, Sáez Hueichapán fue invitada a la Universidad de Waterloo, en Canadá, por la Affordable Energy for Humanity (AE4H) Initiative, para exhibir el proyecto. El mismo año, el profesor Roberto Hernández, presentó el modelo de participación en la conferencia VI Congreso Argentino y Latinoamericano de Antropología Rural-Salta 2015, Argentina.
Ciencia e integración
La investigadora partió de la premisa que “la ciencia puede ayudar no sólo a mejorar la calidad de vida, también puede mejorar la integración”. Por eso, se concentraron en dos sectores: Huanaco Huenchun, una comunidad de 83 familias, ubicada a 11 kilómetros de Nueva Imperial, y José Painecura, de 43 familias, ubicada a 54 kilómetros de Carahue.
La actividad económica se concentra principalmente en la agricultura para el auto consumo, extracción de algas y recolección de mariscos, pero tienen graves problemas con el suministro eléctrico y sus altos costos.
A mediados del 2015, Sáez -con el apoyo del ISCI- postuló al Fondo de Acceso Energético del Ministerio de Energía, que consiste en el “cofinanciamiento de soluciones energéticas a pequeña escala, con energías renovables no convencionales en sectores rurales, aislados y/o vulnerables” Ver http://fae.minenergia.cl/.
La iniciativa de Sáez obtuvo uno de los mejores puntajes de evaluación, adjudicándose 33,5 millones de pesos y comentó que “corresponde a un sistema eólico-solar de 2Kw que se instalará en la sede comunitaria de José Painecura Hueñaliwén, Carahue y que debiese concluir en octubre del 2016”.
Según la experta, los habitantes de José Painecura formaron un comité para ayudar a los investigadores. “Les dije que necesitamos la contraparte de ellos. Fue bonito, porque se organizaron y alguien llegó a decir, ‘este proyecto es nuestro’. Cuatro personas, incluido el lonco, están dentro del comité”.
Y el impacto no para. El 29 de junio se realizará el Seminario “Tecnología e Innovación Rural-Comunidades Mapuches” en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile en Santiago. Además, hasta el 22 de julio, se mostrará una exposición fotográfica del trabajo en terreno. Más información en www.comunidadesmapuchesfcfm.cl
Por Valeria Jaime Lanas