La actividad, que se desarrolló en el Teatro Municipal, contó con la participación de los alumnos que cursarán sus estudios en la Universidad, IP y CFT.
Una inducción a sus más de 2 mil nuevos alumnos, fue la que realizó Santo Tomás en el Teatro Municipal de Temuco, ceremonia en la que fueron recibidos por las autoridades académicas de la sede, dando inicio oficial a una nueva etapa en sus vidas, esta vez, en la educación superior.
La actividad, que se desarrolló en dos jornadas, tanto para los alumnos de las modalidades diurna y vespertina, permitió que los nuevos alumnos de la sede, que en 2015 cursarán sus estudios en las carreras que imparte la Universidad, el Instituto Profesional y el Centro de Formación Técnica Santo Tomás Temuco, conocieran cada una de las unidades académicas y de apoyo con que cuenta la institución, y a las que, como nuevos tomasinos, pueden recurrir durante todo el año.
De esta forma, los nuevos alumnos tuvieron la oportunidad de enterarse de la labor que desarrollan las Direcciones Académicas, el Departamento de Formación General, el Centro de Aprendizaje y la Dirección de Asuntos Estudiantiles y las direcciones académicas de la sede, a través de las presentaciones de sus directoras.
La ceremonia fue encabezada por la rectora de la sede, Rosemarie Junge, quien junto con destacar el proyecto educacional de la institución, enfocado en la formación y desarrollo integral de los alumnos y en garantizar la calidad de enseñanza, los instó a dar cada día su mayor esfuerzo, a estudiar con alegría y entusiasmo y a asumir un fuerte compromiso con su formación profesional.
“Cada uno de ustedes recibirá un fuerte apoyo de parte de Santo Tomás Temuco, en el ámbito académico, social y administrativo. Por ello, de todo corazón, les deseo el mayor de los éxitos, esperando que en nuestra institución puedan alcanzar su sueño y el de sus familias”, manifestó.
La jornada contó con la participación, además, del destacado cantautor regional Juanjo Montecinos, quien interpretó parte de sus éxitos, recibiendo una entusiasta recepción de parte de los nuevos tomasinos, tanto de la jornada diurna como vespertina.
Por Mauricio Antivil