Una diferencia de 30 mil votos separa a la lista B de Bárbara Figueroa, Cristián Cuevas y Jaime Gajardo, de la lista de Arturo Martínez, por lo que la tienda comunista obtendría una hegemonía que no se daba desde 1973 en la multisindical.
La lista B del Partido Comunista, liderada por la dirigente Bárbara Figueroa, directora nacional del Colegio de Profesores, se estaría adjudicando la mayoría de los votos en las elecciones de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), con lo cual el gran derrotado de la jornada sería el actual timonel de la multisindical y candidato de la lista D, Arturo Martínez.
Con el 97 por ciento de las mesas escrutadas, la lista del Partido Comunista “Con unidad y lucha, una CUT Para un Chile justo”, habría obtenido 321 mil 528 votos, seguido de la lista de Martínez con 291 mil 824 preferencias, mientras que la lista A, vinculada a la Democracia Cristiana, encabezada por el presidente del sindicato de Enap, Nolberto Díaz, habría obtenido sólo 98 mil 43 sufragios, y la lista C, del MIR, habría obtenido 6 mil 431 sufragios.
Jornada
Si bien la lista ganadora daría a conocer los cómputos oficiales en las próximas horas, los resultados oficiales de la multisindical serán conocidos este sábado, debido a que el Colegio Nacional Electoral de la CUT se encuentra en Rancagua, donde hubo denuncias de irregularidades en la votación, con cifras de infladas de trabajadores que sobrepasaban la cantidad real de inscritos en los sindicatos de la zona.
En un momento de la jornada trascendió que Arturo Martínez también habría declarado vencedora a su lista, aunque posteriormente se indicó que el dirigente habría optado por “dar un paso al costado”, debido a los anticuerpos que levanta en el sindicalismo y otros sectores sociales.
Nuevo ciclo
En la lista vencedora, además de Figueroa, están Cristián Cuevas y Jaime Gajardo, con lo cual el PC obtendría una mayoría en el Consejo Nacional de la organización, lo que no se repetía desde el año 1973.
Figueroa dijo que los resultados marcan el inicio de “nuevo ciclo, ya no más una Central inhibida y alejada de los movimientos sociales”.