Iniciativa contó con una inversión de un millón 500 mil pesos, destinados a realizar talleres de capacitación en turismo y giras técnicas para capturar nuevos aprendizajes.
Entregar las herramientas y las distintas variables que influyen en las tomas de decisiones para emprender una actividad turística fue el objetivo del proyecto “Fortaleciendo el capital humano de la comunidad Andrés Calbuñir para la actividad turística”, financiado por el Programa Orígenes BID – Conadi, ocasión en que los socios transmitieron lo aprendido a Maritza Bastías Millanao, coordinadora regional del Programa.
Esta iniciativa contó con una inversión de un millón 500 mil pesos, los cuales se destinaron a realizar talleres de capacitación en turismo y giras técnicas a Llaguepulli y a Curarrehue para capturar nuevos aprendizajes. Además se realizó un taller para evaluar los aprendizajes e introducción a la asociatividad.
Uno de los 20 socios que participó de las capacitaciones, Hernán Calbuñir, comentó detalles de lo que significó para los socios este proyecto. “El tema de las capacitaciones fue lo primordial que nos entregó el Programa Orígenes, porque esto nos permitió tomar decisiones y darnos cuentas que no estamos solos y gracias a las giras técnicas nos dimos cuenta que hay personas que ya están trabajando en esta iniciativa, los cuales son un ejemplo para nosotros”.
El comienzo de la actividad turística
La comunidad Andrés Calbuñir se constituyó el año 1994 y está conformada por 53 familias que habitan en el sector Boyeco de Lumaco en las laderas de la Crdillera de Nahuelbuta y el único sustento que tenían para generar recursos era la explotación forestal, lo cual demora 10 años en producir frutos. Todo esto produjo un problema social porque los jóvenes empezaron a emigrar a las ciudades como Santiago y Temuco para buscar otras actividades laborales, comenzando la comunidad a quedar desprotegida, ya que no quedaban valores jóvenes que permanecieran en la comunidad. A consecuencia de esta situación, en el año 2006 esta comunidad se adjudicó el predio Fundo El Maitén de Victoria a través del Fondo de Tierras de Conadi. El predio se caracteriza por tener el 100 por ciento de la superficie con suelos de uso agrícola, además de tener espacios comunitarios como cancha de fútbol, galpones y la sede que está ubicada en la casa patronal. Dentro de sus privilegios destacan su entorno nativo y espacios culturales como la cancha paliwe (lugar para realizar palín) y menokos (espacio de arbustos ancestrales). Una vez instalados, sintieron la necesidad de generar una actividad económica sustentable a raíz de experiencias incipientes ligadas a prestaciones turísticas desarrolladas por miembros de la comunidad.
Apoyo del Programa Orígenes BID – Conadi
Debido a que a la comunidad han arribado turistas extranjeros quienes se han involucrado en el día a día de los socios, los miembros de la comunidad decidieron explotar la idea de involucrar al turista en las actividades cotidianas del lugar que visitan. En el caso de la comunidad Andrés Calbuñir se realizan actividades como reparar cercos, labores de siembra, rodeadura de animales y tareas de cosecha, lo que va acompañado con paseos, comidas y alojamiento. Esto es lo que los motivó a comenzar esta iniciativa para generar recursos y capacitarse en el proyecto “Fortaleciendo el capital humano de la comunidad Andrés Calbuñir para la actividad turística”, financiado por el Programa Orígenes BID – Conadi.
Al respecto, la coordinadora regional de este programa, Maritza Bastías Millanao, señaló que “la comunidad fue beneficiaria en la primera fase del Programa, donde obtuvieron maquinaria forestal y debido al movimiento social que sufrieron, en la segunda fase del Programa Orígenes se apoyó el requerimiento que necesitaban para explotar el área turística”.
Además, manifestó sus felicitaciones a la comunidad indígena por esta iniciativa turística, la cual les ayudará para generar recursos y avanzar en esta área tan importante como lo es el turismo, así mismo destacó el entusiasmo que le han puesto a esta propuesta.