“Aquí no había nada, no era una orden de allanamiento, no se buscaba a ninguna persona, sino, brindarle apoyo a una familia que se sentía amenazada y pidió auxilio a través del Ministerio Público”, sostuvo el general Nabih Soza.
Luego que esta mañana, tres carabineros resultaran lesionados de diversa consideración, al ser atacados con palos, piedras y armas de fuego, en una acción que por mandato de la Justicia, efectuaban en el Fundo Curaco, comuna de Collipulli, y donde hace algún tiempo fue asentada una comunidad mapuche, el general Nabih Soza, quien es el jefe de la IX Zona de Carabineros Araucanía, señaló que “se estaba dando cumplimiento a una instrucción particular de la Fiscalía en el sentido de brindar el auxilio de la fuerza pública. En el fondo era una mudanza, una familia que se iba a retirar de una comunidad y la misma gente de la comunidad impedía que se retiraran del lugar, ya cuando los vehículos van haciendo abandono, fueron atacados por personas que estaba escondidas dentro del follaje con nutrido fuego de escopetas, a muy corta distancia”, dijo el alto oficial uniformado.
“Hay vehículos que tiene alrededor de 300 impactos de perdigones y lamentamos mucho lo que está pasando. Aquí no había nada, no era una orden de allanamiento, no se buscaba a ninguna persona, sino, brindarle apoyo a una familia que se sentía amenazada y pidió por tanto el auxilio a través del Ministerio Público”, sostuvo el general Nabih Soza.
Al consultársele cuántos efectivos resultaron lesionados y qué tipo de lesiones tienen, el general informó que “tenemos tres carabineros lesionados, uno de ellos producto directamente de los perdigones de escopetas que los tiene alojados en el hombro izquierdo y dos, producto de los vidrios uno de ellos con esquirlas en su ojo izquierdo y otro funcionario con restos de vidrio que se le incrustaron en el rostro”.