Además de Jorge Luchsinger, declaró la hermana de la fallecida en el segundo día del juicio donde el único acusado es el machi Celestino Córdova. “Hubo un plan premeditado para atentar contra las personas”, dijo el fiscal Cristián Paredes.
Por 2 horas prestó declaraciones Jorge Luchsinger, el hijo del matrimonio Luchsinger MacKay muerto en el ataque ocurrido en enero del 2013 en la granja Lumahue, comuna de Vilcún.
En el segundo día de juicio oral contra el machi Celestino Córdova, único imputado por el incendio con resultado de muerte del matrimonio Luchsinger MacKay, también se escuchó el registro de la grabación donde Vivianne MacKay llama solicitando ayuda a Carabineros tras el ataque que había recibido su esposo en el hogar.
Durante esta jornada, el hijo de los Luchsinger no pudo contener la emoción al narrar los instantes que rodearon el trágico hecho que terminó con el fallecimiento de sus progenitores. Tras su declaración, vino el turno de Cynthia MacKay, hermana de la víctima.
Para las próximas jornadas se espera que declaren algunos peritos que serán presentados por el Ministerio Público, y se mostrarán más pruebas.
El fiscal regional de La Araucanía a cargo del caso, Cristián Paredes, se refirió durante la audiencia al testimonio de Jorge Luchsinger, quien hizo un gran esfuerzo al relatar los hechos.
“Hemos escuchado el testimonio desgarrador de la víctima, me refiero al hijo del matrimonio, quien ha relatado pormenorizadamente lo que aconteció esa madrugada del 4 de enero, lo que significó para él y para toda su familia, este atentado y la terrible muerte de sus padres”, señaló.
Temor diario
Añadió que “al mismo tiempo ha referido el temor con el que estos vivían en el sector, el temor que siente él cada día de sufrir atentados de la misma especie, temor que sustenta no sólo en los hechos que afectaron de manera tan tremenda a sus padres, sino que también a otras víctimas y personas que habitan la región”.
A juicio del fiscal, el testimonio prestado a continuación por Cynthia Mackay, evidencia también la idea presentada por la Fiscalía en los alegatos de apertura. “Aquí hay una sensación de temor, que es generalizado en la población, que estos actos no ocurren espontáneamente, que hay preparación de los mismos, y que todo ella da cuenta tanto el modus operandi como la preparación, que tuviesen un plan premeditado de atentado contra un grupo de personas”, señaló Paredes.
El fiscal regional enfatizó además que no sólo Werner y Vivian sufrieron atentados, sino que “miembros de su familia, hace más de una década han sido atacados de la misma forma”.
“Se ha referido que la noche anterior las víctimas pasaron una muy mala noche, puesto que sintieron ruidos, vieron luces, y también escucharon el ladrido de perros que daban cuenta de personas merodeando por el lugar. Todo esto abona el punto de que hay un plan premeditado para atentar contra las personas”, concluyó Paredes.
Jornada de peritajes
En la segunda parte de la jornada declararon además tres peritos del Laboratorio de Criminalística de la PDI, que se refirieron a las conclusiones de peritajes fotográficos, planimétricos y químicos realizados en el sitio del suceso.
A través de estas pericias, se pudo establecer que el incendio de la casa de la familia fue intencional y que además se intentó incendiar un vehículo del matrimonio, que se encontraba estacionado a muy corta distancia.
La perito químico de la PDI, Myriam Morales, explicó también un peritaje practicado al polen hallado en las botas que le fueron incautadas al acusado el día de su detención en el Hospital Regional de Temuco, el cual concluye que es compatible con la plantación de papas sembrado en el predio de las víctimas.
“Esto nos sitúa aún más a Celestino Córdova en el sitio del suceso, ya que recordemos que fue encontrado huyendo desde el predio de la familia Luchsinger y a través de un potrero sembrado de papas. Estos peritajes junto a los otros elementos de prueba nos permiten acreditar más allá de toda duda razonable la participación culpable de autor del imputado en estos hechos,” destacó el fiscal regional Cristian Paredes.
Celestino Córdova es también acusado como autor del ataque perpetrado el día 23 de diciembre del 2012 en el Fundo Santa Isabel de Lautaro.
Por estos dos ataques, Córdova podría enfrentar penas de presidio perpetuo calificado en el caso Luchsinger MacKay y 30 años más por el ataque al fundo del agricultor Pio Seco en el mencionado Fundo Santa Isabel.