
El ente persecutor presentó una serie de pruebas que apuntan a que las compañías se coordinaron para manipular los resultados de las licitaciones de permisos de operación de casinos.
La Fiscalía Nacional Económica presentó un requerimiento ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia y denunció una colusión entre las cadenas de casinos Dreams, Enjoy, y Marina del Sol.
El ente persecutor presentó una serie de pruebas que apuntan a que las compañías se coordinaron para manipular los resultados de las licitaciones de permisos de operación de casinos.
De esta manera, los privados habrían afectado a la libre competencia y causado perjuicios al Fisco. Con los antecedentes presentados ante el TDLC, la FNE solicitó multas de 171 mil 354 Unidades Tributarias Anuales (UTA), es decir, cerca de 151,9 millones de dólares contra cuatro altos directivos de los casinos, que en caso de acogerse, sería la multa económica más alta en la historia.
Además, solicitó que se revoquen los permisos renovados a las empresas involucradas en esta situación y que se inicie un nuevo proceso competitivo en Calama, Antofagasta, Copiapó, San Francisco de Mostazal, Santa Cruz, Talca, Talcahuano, Los Ángeles, Temuco, Valdivia, Osorno y Punta Arenas, San Antonio y Rinconada de Los Andes.
Dentro de los antecedentes presentados por la Fiscalía Nacional Económica están una serie de chats de WhatsApp y el servicio de mensajería con un mayor nivel de seguridad, Confide, entre el exgerente general de Dreams, Jaime Wilhelm, el expresidente del directorio de Marina del Sol, Nicolás Imschenetzky y el expresidente del directorio de Enjoy, Henry Comber.
Entre los mensajes expuestos por Pulso, aparecen cómo se coordinaron para reunirse en “secreto” para ponerse de acuerdo en sus acciones.
Por otro lado, en su declaración, Imschenetzky, que tomó la delación compensada, confesó que dentro de aquellas reuniones, Jaime Wilhelm les dijo: “Sería ridículo llegar a una licitación que nos hagamos daño y que hagamos ofertas locas y que nos destruyamos económicamente nuestras compañías”.
Frente a esta afirmación, el resto de directivos apoyaron la idea del gerente de Dreams. “Bueno, si la verdad es que, si ustedes no van a postular en ningún lado más, dejémoslo así”, les dijo Imschenetzky según su declaración.
“Y ahí Claudio Fischer se para y dice ‘Bueno, ahora podemos estar más o menos todos tranquilos’ y me extiende la mano. Entonces yo le digo, le vuelvo a insistir, le doy la mano a Claudio y le dije ‘les recuerdo, yo en el fiscal específicamente de Enjoy no confío’. En Enjoy nunca he confiado (…) Tenía claro que estaba en un acuerdo con Dreams de no competir, pero también tenía que saber si estaba Enjoy en esa reunión o no; y saber si este acuerdo se…cómo hacíamos para que esto se respetara”, agregó.