Equipo multidisciplinario del Servicio de Cardiología práctico con éxito un procedimiento que antes sólo se realizaba a corazón abierto.
“Me siento feliz, con energía y con ánimo”, señaló el paciente J.M.F.R., de 82 años, que desde Vilcún llegó al Hospital Hernán Henríquez de Temuco para ser el primer paciente operado con implante percutáneo de una válvula aórtica que, según explicó el cardiólogo intervencional, Carlos Olivares, “se realizó a un adulto mayor que tenía una estenosis aórtica. Esto significa una válvula con problemas en su apertura que le producía mucha sintomatología y lo limitaba en sus actividades de su vida diaria”.
En la cirugía estuvo presente el también cardiólogo intervencional del Hospital Guillermo Grand Benavente de Concepción, Luis Pérez, quien certificaría que “a corto plazo estaríamos validados para realizar estos procedimientos de manera permanente. Lo que se hace es que, a través de un acceso transfemoral, que es la arteria de la pierna, se libera una válvula a nivel cardíaco”, agregó el especialista.
Estenosis Aórtica
La estenosis aórtica es una enfermedad frecuente en personas longevas causada por una estrechez en la principal válvula de salida del corazón, que permite que la sangre rica en oxígeno pase del ventrículo izquierdo a la aorta, que es la que transporta la sangre al resto del organismo y que, hasta hace un par de años, tenía como único tratamiento la cirugía a corazón abierto.
Así lo confirmó el paciente operado, quien dijo no sentir ningún dolor. “Ayer apenas podía caminar, entonces feliz me siento con lo que han hecho los médicos y les deseo lo mejor posible por salvarme la vida. Yo creo que esta operación puede ser un ejemplo para otras personas, porque soy el primero en recibir esta válvula de vida. Ojalá que se lo coloquen más personas y se sientan bien”.
Luis Quiñiñr Salvaticci, cardiólogo y jefe del Servicio de Cardiología, señaló que “para realizar esta técnica, se requiere mucha planificación de distintos equipos clínicos especializados: cardiólogos clínicos, médicos especializados en imágenes, cardiólogos intervencionistas, cirujanos cardiacos enfermeros, tens. El procedimiento que se realizó es el fruto de todo nuestro equipo con el apoyo de nuestras autoridades que fue fundamental”.
En tanto, Mauricio Soto, jefe técnico de la UPC, dijo que “es muy importante implementar esta técnica de avanzada, que nos pone al mismo nivel de otros centros cardiológicos”.
Al respecto, la subdirectora médico (s), Virginia Iturrieta, destacó la importancia de este procedimiento que se traduce también en un beneficio para el hospital y usuarios que esperan hace mucho tiempo una cirugía cardíaca, ya que el tiempo de recuperación en este procedimiento es muy corto en relación con las de corazón abierto, “pudiendo así estrechar las brechas de espera y resolución, sobre todo a los pacientes mayores de 75 años, asegurando una atención más rápida y flujo de pacientes más eficiente”.
Para Juan Carlos Bahamondes, jefe de Cirugía Cardíaca, el implante percutáneo de válvula aórtica (TAVI) ha progresado rápidamente gracias al enfoque basado en un equipo multidisciplinario para pacientes valvulares y el compromiso riguroso con la medicina basada en la evidencia. Los rápidos avances de la tecnología han impulsado su desarrollo hasta situarlo en la vanguardia de las opciones de tratamiento. Permite que se reduzca la estadía hospitalaria, sin embargo, al ser tan incipiente, su costo aún permanece muy por sobre una cirugía valvular standard con circulación extracorpórea y hace que aún no esté al alcance de todos los usuarios de nuestro sistema de salud. En los últimos años, las indicaciones para el TAVI se han ampliado con el respaldo de evidencia sólida, estando actualmente indicado para pacientes con riesgo quirúrgico prohibitivo, alto o intermedio portadores de otras patologías graves. Como equipo multidisciplinario de cirujanos cardiacos, cardiólogos, anestesiólogos y el apoyo de tecnólogos médicos, estamos muy contentos de iniciar este programa en el Hospital Hernán Henríquez, con lo que nuestro centro se posiciona en el sur de Chile como centro de derivación para este tipo de procedimientos avanzados y se suma a la experiencia alcanzada por otros en nuestro país”, concluyó.
Este procedimiento y aplicación contó con el apoyo y ayuda de la anestesista, Milca Villagrán, radiólogo, Marcelo Godoy, la cardióloga clínica Salinas, Rodrigo Sanhueza enfermero jefe de hemodinamia y técnicos en enfermería nivel superior.