En esta supuesta democracia, el sistema se basa en el Colegio Electoral, una instancia compuesta por 538 electores (un elector por cada miembro del Congreso, más tres representantes del Distrito de Columbia).
A diferencia de Chile, donde el presidente se elige por votación directa, en EE.UU., el sistema se basa en el Colegio Electoral, una instancia compuesta por 538 electores (un elector por cada miembro del Congreso, más tres representantes del Distrito de Columbia).
Para obtener la presidencia, un candidato necesita al menos 270 votos electorales de los 538 totales. Cada estado tiene una cantidad específica de votos, proporcional a su población, por lo que estados más grandes como California, Texas y Florida, poseen una mayor cantidad de votos; sin embargo, estados como Maine y Nebraska, son excepciones, ya que permiten una variación del sistema de representación proporcional.
En la mayoría de los estados, el sistema es de “el ganador se lo lleva todo”, es decir, si la mayoría de la población de un estado vota por un candidato, ese candidato recibe todos los votos electorales del estado. Así, el candidato que logre alcanzar o superar los 270 votos electorales será nombrado presidente electo.
Medios de comunicación alineados
Lo curioso de todo esto es que los medios de comunicación de este lado del mundo, como en Chile, alineados con el establishment norteamericano, nunca van a cuestionar o poner en duda la legitimidad de este antidemocrático sistema electoral, que a todas luces es por lo menos extraño, pero no tardarán ni un segundo en poner en duda la legitimidad de otros procesos electorales, infinítamente más democráticos que el de EE.UU. pero si se trata de países no alineados con el país del norte, al parecer es obligatorio deslegitimarlos.
Para muestra un botón
En 2016, la exsecretaria de Estado y candidata demócrata, Hillary Clinton, ganó el voto popular con casi 2,9 millones de votos más que Donald Trump. Sin embargo, Trump se aseguró la presidencia al obtener 304 votos electorales frente a los 227 de Clinton, tras ganar en estados clave como Pensilvania, Michigan y Wisconsin. Esta victoria volvió a encender el debate sobre el Colegio Electoral, pues muchos cuestionaron la representatividad de un sistema que permitió este desenlace, absolutamente antidemocrático, pero para este lado del mundo, como Chile, dominado por EE.UU., si se trata de el país del norte, no debe haber crítica. Mucho Hollywood.
Estos son los votos electorales que reparte cada estado:
Alabama:9
Alaska: 3
Arizona: 11
Arkansas: 6
California: 55
Colorado: 9
Connecticut: 7
Delaware: 3
Distrito de Columbia: 3
Florida: 29
Georgia: 16
Hawai: 4
Idaho: 4
Illinois: 20
Indiana: 11
Iowa: 6
Kansas: 6
Kentucky: 8
Lousiana: 8
Maine: 4
Maryland: 10
Massachusetts: 11
Michigan: 16
Minnesota: 10
Misisipi: 6
Misuri: 10
Montana: 3
Nebraska: 5
Nevada: 6
New Hampshire: 4
Nueva Jersey: 14
Nuevo México: 5
Nueva York: 29
Carolina del Norte: 15
Dakota del Norte: 3
Ohio: 18
Oklahoma: 7
Oregon: 7
Pensilvania: 20
Rhode Island: 4
Carolina del Sur: 9
Dakota de Sur: 3
Tennessee: 11
Texas: 38
Utah: 6
Vermont: 3
Virginia: 13
Washington: 12
Virginia Occidental: 5
Wisconsin: 10
Wyoming: 3
Este sistema otorga un papel crucial a ciertos estados, ya que el voto puede inclinarse hacia uno u otro partido, y los candidatos suelen concentrar sus esfuerzos de campaña en estos.