A principios de año, Conadi y Bienes Nacionales renovaron este convenio por segundo año consecutivo, debido a los positivos resultados obtenidos durante el año pasado.
El millonario convenio entre Conadi y Bienes Nacionales ha tenido un extraordinario éxito en estos dos años, pues deja a las familias y comunidades en condiciones de ser beneficiarias por la inmensa oferta pública del Gobierno que exige la titularidad de las tierras que se habitan o trabajan y de sitios de significación cultural como cementerios y lugares ceremoniales.
A principios de año, Conadi y Bienes Nacionales renovaron este convenio por segundo año consecutivo, debido a los positivos resultados obtenidos durante el año pasado, pues además de responder a la demanda de familias y comunidades indígenas de La Araucanía, quienes desean obtener sus inscripciones de propiedad, también permite legalizar la Inscripción de la Propiedad Individual en los correspondientes conservadores de Bienes Raíces.
El propósito de esta labor es otorgar certeza jurídica a la ocupación o uso ancestral de tierras indígenas, ampliar las tierras y situar a las familias y comunidades en condiciones de ser beneficiarias de los programas del Estado que suponen titularidad del dominio sobre la tierra que se habitan o trabaja, además de sitios que tienen importancia cultural para las comunidades, tales como cementerios, gillatuwe (lugar de ceremonias) y paliwe (canchas de palín).
Los terrenos
“Lo importante de esta actividad es que no solamente se regularizan títulos de dominio individuales, también hay sitios de escuelas, sitios de significación cultural como paliwe, rewe y eso parte de la mirada integral que tiene nuestro Gobierno al poner en valor a nuestros pueblos originarios”, señaló Germán Riquelme, director nacional (s) de la Conadi.
“Esto significa entregarle el dominio real del bien, es darle la oportunidad a ellos que puedan establecer los programas, nexos y ayudas con el Gobierno, con las instituciones que trabajan y les piden permanentemente, el dominio del bien, es decir, aquí no hacemos nada más que hacer justicia. Por lo tanto, creemos que este es un derecho para las personas y comunidades, en que los podemos acercar al Estado, al Gobierno y a todos sus programas”, indicó Andrés Molina, intendente de La Araucanía.
“Esta ceremonia es muy emotiva, porque representa genuinamente el interés del Gobierno y de nuestro intendente, por el pueblo mapuche en lo que respecta a la tenencia de la tierra”, expresó Héctor Méndez, seremi de Bienes Nacionales de La Araucanía.
Ceremonia en Temuco
En esta oportunidad, fueron 144 familias las que recibieron sus títulos de dominio en una ceremonia que se realizó en el auditorio de la Municipalidad de Temuco, donde participaron el director nacional (s) de la Conadi, Germán Riquelme; el intendente de La Araucanía, Andrés Molina; el alcalde de Temuco, Miguel Becker; el seremi de Bienes Nacionales, Héctor Méndez; y las familias y comunidades beneficiadas.
“Vengo emocionada a recibir el título de dominio de la sede de mi comunidad por el cual hemos trabajado por cinco años. Fue difícil, pero gracias a todas las gestiones de Conadi y Bienes Nacionales, hoy estamos felices y hemos venido con personas de la comunidad a recibir el título de nuestra sede comunitaria”, agradeció Carmen Garrido, presidenta de la comunidad Pascual Calfuñir, comuna de Freire.
“Este es un gran beneficio porque nos sentíamos un poco abandonados, en cambio ahora tenemos derecho a todos los beneficios y además vamos a poder preservar nuestro rewe, un lugar sagrado para nosotros, que es como la iglesia para los mapuche, donde vamos a pedir y agradecer por la salud y bienestar de nuestras comunidades”, dijo Arturo Melín, de la comunidad Juan Antil.
Cabe destacar que este convenio tiene una importancia vital dentro de las comunidades mapuches, ya que gracias a estos títulos, se les abre un mundo de oportunidades para postular a toda la gama de beneficios que otorga el Estado a través de la red pública, tales como subsidios habitacionales y programas de Indap, Conaf, SAG, Fosis y Sercotec, entre otros organismos.
Por Luis Fuentes