El experto comparte su experiencia y conocimiento para que descubras cómo mantener una alimentación saludable en la temporada estival.
¿Te preguntas cómo mantener una alimentación saludable y cuidarte durante el verano? No te pierdas las recomendaciones del director de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Santo Tomás Temuco, Manuel Alarcón Hormazábal, donde nos entrega desde opciones frescas y deliciosas, hasta estrategias para mantener tu energía en su punto máximo.
Según explicó Alarcón, “el verano es una época para disfrutar, descansar, desconectarnos del trabajo y compartir en familia. En este ambiente distendido, es habitual excedernos y/o gozar de los placeres de la comida, porque sí, la comida es un placer, del cual en marzo solemos arrepentirnos. Por eso, entregaremos algunos consejos para cuidarnos en verano”.
1.- Debido al aumento de las temperaturas y normalmente de la actividad física, debemos hidratarnos más. Al aumentar el calor del cuerpo, perdemos más agua, por lo que debemos beber más líquidos. Un consejo práctico es beber dos litros de agua al día, distribuidos durante varias horas.
2.- Si bien, en veranos dormimos más y nos despertamos más tarde, intenta distribuir tus comidas en cinco horarios, idealmente que estas comidas sean ligeras. Esto evita que tengamos sólo tres comidas muy abundantes, incluso dos, lo que es un factor que influye en el aumento de peso.
3.- Aumenta el consumo de frutas y verduras, estas aportan agua, vitaminas, minerales y fibra. También mejora la digestión. Si no te gustan, las puedes hacer jugo.
4.- Evita las comidas muy abundantes, tan típicas de las celebraciones familiares en verano.
5.- Si vas a comer una entrada, que sea ligera. Incorpora frutas y verduras, alimentos ricos en nutrientes, pero no pesados: ensaladas, entre otros.
6.- Evita la cocina con exceso de frituras y grasas. Recuerda que las técnicas de cocina más sencillas tienen a facilitar la digestión y son muy recomendables para el verano, por ejemplo, carne a plancha, parrilla, horno, vapor, entre otros.
7.- Para los que aumentan su actividad física en verano (deportistas), le vamos a sugerir que no descuiden su consumo de hidratos de carbono, no obstante, una recomendación: si bien aportan energía, debe privilegiar preparaciones saludables, por ejemplo, ensaladas de pasta, añadir legumbres a las ensaladas, cereales en el desayuno.
8.- Aunque nos cause dolor, debemos referirnos a los postres. En verano, aumenta el consumo de postres, los cuales son -comúnmente- altos en azúcar. Una recomendación: un buen postre sería yogur o helado de yogur (descremado o bajo en grasa), jugos naturales y/o simplemente el mejor de los postres frutas en sus diversas preparaciones. Le dejo ahí un desafío a la creatividad culinaria.
Por último, es muy frecuente en verano comer fuera de casa o pedir comida elaborada para llevar o -simplemente- llamar y pedir. Por supuesto que es sabrosa, no obstante, estas pueden ser altas en calorías (por su preparación, ingredientes y/o volumen). Una sugerencia: aprenda a disfrutar de la cocina, intente cocinar en familia, disfrute de sorprender a su entorno con alguna preparación y, ahí, se luce con una alimentación rica y saludable. Me parece que hacer de la cocina una experiencia de creación y disfrute es un bien comienzo para alimentarnos en forma equilibrada y entretenida.
¡Haz del verano una temporada de bienestar! Sigue estos consejos del director de Nutrición y Dietética y descubre cómo alimentarte de manera equilibrada y entretenida.