La Mandataria tuvo una extensa conversación que se alargó por 47 minutos, en donde también conversaron de la visita programada por el religioso a nuestro país el próximo año, aunque aclaró que aún no hay fecha confirmada.
Durante 47 minutos, en una reunión que se destacó por lo extensa, conversaron en el Vaticano la Presidenta Michelle Bachelet y el Papa Francisco, en el marco de una visita oficial al Estado católico.
El encuentro se desarrolló en la Biblioteca del Pontífice, en un ambiente cordial y amable, y tras la reunión, la Mandataria tuvo un punto de prensa, donde calificó el encuentro de “espléndida”.
“Fue una reunión donde él ha sido extraordinariamente cariñoso, informado y apoyador de todo proceso que permita hacer de Chile una patria más justa, más solidaria, donde nuestros compatriotas puedan salir de la desigualdad y tener una vida más feliz”, manifestó la Presidenta.
Agregó que “ha sido una reunión espléndida por la gran acogida que he sentido con él como pastor y por la posibilidad de reflexionar e intercambiar opiniones a este respecto”.
“El Papa está al tanto de todo”
Bachelet no entregó muchos detalles de la reunión, pero manifestó que “hemos intercambiado reflexiones en el sentido de lo que estamos haciendo en Chile y que él conoce en detalle”.
Al ser consultada si se tocó el tema del conflicto marítimo con Bolivia y de la agenda valórica, a lo que respondió que “hemos conversado en detalle. El Papa está al tanto de todo. Fue apoyador de los procesos y fue una reunión muy grata”.
Sobre la visita papal a Chile programada para el próximo año, la Jefa de Estado dijo que se habló, aunque aclaró que “no hay fecha fija aún. Hablamos de la crisis de confianza y la crisis de representatividad y que todos quienes tenemos un rol en la política y en lo moral, podemos hacer que el valor de lo colectivo, sea un valor importante”, añadió.
Los regalos
Bachelet llegó al Vaticano acompañada de una delegación compuesta por 12 personas y fue saludada por el Papa, quien le expresó su satisfacción por recibirla.
“Encantado de que esté aquí”, le dijo el Pontífice, según la representación de los medios acreditados ante la Santa Sede que asistieron al encuentro.
Vestida de negro, con unos zapatos de tacón bajo y sin mantilla, Bachelet conversó primero en privado con Francisco.
Posteriormente, ya en público, procedieron al habitual intercambio de regalos.
Bachelet le obsequió a Jorge Bergoglio un rosario de lapislázuli y plata, y también con un libro titulado “Iglesias del fin del mundo” sobre iglesias chilenas.
Bergoglio le entregó un ejemplar en castellano de su exhortación apostólica “Evangelii Gaudium” y un medallón de bronce.
Después, Bachelet fue recibida por el secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolin.
Por nuestro medio asociado Nación.cl